Las alarmas GSM son inalámbricas y funcionan gracias a las tarjetas SIM. Su manejo es sencillo, vía dispositivo móvil. Son una modalidad de alarma que garantiza su funcionamiento gracias a que no necesita conexión a Internet.
Una alarma GSM es un sistema de alarma inalámbrico, que funciona sin tener conexión a internet, mediante dispositivos móviles. Son alarmas que utilizan una tarjeta SIM para recibir y enviar notificaciones. Al igual que cualquier modalidad de alarma está compuesta por distintos elementos como cámara o sensores.
El funcionamiento de las alarmas GSM comienza cuando la alarma salta porque ha recibido la señal de alguno de los detectores instalados: cámara, movimiento, incendio o inundación.
Cuando esto sucede se da la señal de alarma, la central receptora recibe la notificación y a su vez, el propietario, gracias a los dispositivos móviles recibe también un sms con el aviso.
Los kit de alarmas GSM los comercializan las compañías de seguridad e incluyen los elementos considerados más importantes para mantener la seguridad del lugar. Aunque hay unos elementos que suelen tener todos los kit, también se pueden añadir dispositivos adicionales en función de las necesidades que se quieran cubrir.
Entre los elementos más habituales y necesarios son los siguientes:
Dentro de las alarmas GSM se pueden diferenciar las alarmas con cuotas y las alarmas sin cuotas.
Las alarmas GSM al ser inalámbricas tienen diferentes ventajas respecto a la instalación pero también a su funcionamiento y eficacia. Alguna de sus ventajas más destacadas son las siguientes:
Las alarmas GSM puedes encontrarlas en el mercado por precios muy dispares entre sí. El motivo es por la tipología: alarma con cuotas y alarma sin cuotas; y por los elementos que se quieran incluir.
Las alarmas sin cuota solo requieren una inversión inicial. Esta oscila entre los 50€ y los 150€. La alarma con cuotas, como son instaladas y necesitan de un contrato, los precios son más elevados. Son alarmas por las que se paga una cuota mensual para disponer de la conexión con la central receptora de alarmas. Dicha cuota mensual oscila entre los 30€ y 50€. A lo que hay que sumar el precio de instalación a manos de especialistas y el coste del equipo.
Las alarmas wifi y GSM difieren en un aspecto. Las alarmas wifi deben estar conectadas a un router y, por tanto, necesitan conexión a Internet. Por su parte, las alarmas GSM, mantienen su conexión gracias a una tarjeta SIM, que debe tener incorporada tanto el dispositivo móvil como la alarma.
Hay alarmas que tienen incorporadas los dos tipos de conexiones: GSM y wifi. En este caso, las notificaciones se envían mediante sms y la aplicación.
Depende del modelo, pero sí. Las alarmas GSM tienen una tarjeta SIM a la que se puede llamar para escuchar qué sucede alrededor de la alarma, si el dispositivo tiene esta característica.
Benjamín Pelaz Benjamín es licenciado en Periodismo con 10 años de experiencia como redactor web, prensa y agencias de comunicación. En Roams se ha convertido en experto sobre seguros de todo tipo y servicios de instalación de alarmas. Benjamín también es deportista, por lo que es especialista en seguros de nicho como los seguros para bicis y otros dispositivos.